Los precios subieron en octubre un 5,5% respecto al año pasado, un precio que no se veía desde septiembre de 1992, hace 29 años. Por esa subida de precio la vida se está encareciendo por los altos precios de electricidad, combustibles, el repunte del consumo y los problemas en las cadenas de suministro globales. Además del colapso en los puertos, la falta de contenedores, la escasez de trabajadores, la carencia de chips y un aumento inasumible de los pedidos por el desembalse del ahorro acumulado por los hogares durante la pandemia en un entorno de estímulos públicos y recuperación económica.
El potente repunte ha venido auspiciado por un aumento de la tasa mensual del IPC del 2%.Mientras la inflación subyacente que no tiene en cuenta los precios de la energía y de los alimentos frescos se mantiene en el 1,4%. Lo que ha provocado que en el último mes algunas variables empeoren. El petróleo brent cotiza hoy a 83 dólares mientras que en septiembre estaba a 78 dólares y en los primeros 27 días de octubre el precio medio de la electricidad ha sido de 208,05 euros por megavatio hora, el mes más caro de la historia que ha crecido por los máximos del precio del gas natural y la escalada de los derechos de emisión de dióxido de carbono. Esas cifras tienen un impacto sobre el bolsillo de los hogares que salvo en el caso de las pensiones ligadas al IPC pierden poder adquisitivo al no aumentar sus salarios al mismo ritmo que lo hacen los precios. Y sobre las cuentas públicas que han de afrontar el mayor coste de las jubilaciones.
La cifra de octubre ha sobrepasado las estimaciones de los analistas de Funcas para todo el año. El servicio de estudios de las antiguas cajas de ahorro predijo que en un escenario en el que el precio de la electricidad se estabilizara, el pico sería del 5% en noviembre antes de empezar una senda decreciente. Y del 5,3% en caso contrario.
Inflación temporal o transitoria?
La respuesta enfrenta dos formas de pensar: la primera dicha por el Banco Central Europeo y la Reserva Federal estadounidense asegura que se trata de un fenómeno transitorio que es básicamente provocado por la pandemia , es decir, que los precios han subido por culpa de la pandemia, cuando el consumo se desplomó por las restricciones toda comparación con 2020 es distorsionada.
Nieves Benito responsable de Fundamental Research de Santander AM también apuesta por la temporalidad de la inflación. Ya que piensan que podría ser transitoria porque la oferta y demanda se irá ajustando. En el lado de la demanda ya no tenemos la ayuda de los gobiernos y por el lado de la oferta se irá también normalizando cuando el covid no sea una amenaza y no suponga más restricciones. Por el lado del coste de la energía a pesar de que se sigue produciendo un desajuste entre demanda de energía y oferta ven que es improbable que continúen subiendo más allá de los precios actuales. Esto lo estamos viendo en los precios del gas que se están estabilizando ya en niveles pico.
La secretaria del Tesoro de EE UU afirmó el domingo que espera que la moderación de precios se produzca en la segunda mitad de 2022. Y los economistas del BCE opinan que la inflación irá disipándose próximamente pese a que ha sobrepasado sus estimaciones iniciales y la han revisado situándola en el 2,2% en 2021, en el 1,7% en 2022 y en el 1,5% en 2023.
Enfrente los llamados halcones advierten de los peligros de una espiral inflacionista ya que si las subidas de precios se trasladan a los salarios de los trabajadores y a otros productos generando un círculo vicioso que se retroalimenta.
El aumento de la inflación puede llevar al Banco Central Europeo a hacer algo si bien hay factores que lo desaconsejan. Aunque seguimos pensando que las subidas de tipos aún están lejos es cierto que si la inflación se mantiene presionada más tiempo del previsto podría llevar a una retirada más rápida de las compras de deuda del BCE.En cualquier caso, creemos que es difícil dar marcha atrás en la política monetaria ultra expansiva teniendo en cuenta los elevados niveles de deuda acumulados que persisten riesgos sobre el crecimiento y si la inflación se demuestra finalmente como coyuntural.
En conclusión esta inflación que está ocurriendo en los últimos meses básicamente es por el covid 19 ya que por las restricciones no ha podido funcionar bien las empresas.Es una inflación transitoria ya que se supone que cuando acabe la pandemia los precios de los productos, de la electricidad, de los combustibles… volverán a la normalidad ya que dejarán de haber restricciones que puedan perjudicar a las empresas y al gobierno.
Fecha de publicacion 14 de diciembre